
Impulsar la danza como una profesión legítima
- Inician las actividades de la Semana de la Mujer 2025
Tijuana, B. C., a 04 de marzo de 2025.- La mayoría de las personas se inician en la danza como una actividad extraescolar que, con el paso del tiempo, se asume como una práctica enriquecedora que forma a las infancias y adolescencias, coincidieron en señalar las hermanas Dulce y Marianna Escobedo Muñoz, fundadoras del Conservatorio de Danza México.
Las hermanas Escobedo asistieron como invitadas para impartir el tema «Danza: juego, vida y profesión», durante las actividades de la Semana de la Mujer 2025: Mujeres y Praxis. Testimonios Vivos, organizado por Difusión Cultural de la Universidad de Tijuana CUT, Campus Altamira, un espacio de reflexión y aprendizaje para la comunidad universitaria, en conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
“En espacios como el Conservatorio, y en los espacios en los que nosotras estudiamos, si hay una fuerte orientación al camino profesional”, aseguró la coreógrafa Dulce Escobedo al indicar que se va sembrando la idea de que la danza puede ser parte de la vida de los estudiantes.
Dulce se inició en la danza a los 5 años en la Escuela de Danza Gloria Campobello y cuenta con una Maestría en Coreografía por el Instituto de las Artes de California (CalArts); Marianna empezó a los 6 años y estudió la Licenciatura en Danza por la Universidad de las Américas Puebla. Ambas fueron acreedoras del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA) en la emisión de 2019.
Al empezar en la danza a su temprana edad, para Dulce y Mariana fue como un juego, pero, al entrar a la etapa de la adolescencia, la danza formó parte de sus vidas. Salían de la primaria y se incorporan a sus clases de danza por lo que la asumieron como una disciplina y una formación, una herramienta de trabajo en equipo, de respeto a sus maestros y compañeros, como una herramienta de perseverancia.
“Eso es lo que reforzamos nosotros en el Conservatorio, que las adolescentes tomen la danza como una herramienta de disciplina y de formación, independientemente de que vaya a ser su carrera profesional o no”, mencionó Dulce.
Recordó el caso de una alumna que inició en el Conservatorio de Danza México a los 5 años, pero al terminar la preparatoria les aviso que ella no continuaría con la danza, a pesar de todas las cosas positivas que le aportó la danza, sin embargo, su decisión fue respetada. Hoy, esa chica se ha convertido en la mejor estudiante de gastronomía y reconoce que la danza le aportó dominio del cuerpo y disciplina, elementos de los que hace uso para destacar en otra carrera.
Marianna Escobedo comentó que para ella la danza ha sido una actividad familiar, una forma de expresión, de quehacer muy natural y habitual. “Desde niñas la danza siempre te permite jugar, explorar, conocer y mover el cuerpo desde formas que probablemente no son cotidianas. Creo que ese interés es importante transmitirlo desde temprana edad”.
Mencionó que, con su hermana, iniciaron en 2016 con el Conservatorio de Danza México, están por cumplir el noveno aniversario este mes de marzo; es un espacio para la danza de todas las edades, tienen grupos a partir de los 3 años, adolescentes, adultos y personas de la tercera edad.
Las hermanas Escobedo consideran que la etapa de la infancia es la más importante para iniciar en la danza, por la buena experiencia que ellas tuvieron precisamente en su niñez. En su escuela llevan a cabo un programa de iniciación al movimiento para niñas y niños de 3 a 5 años, en una clase en la que se les comparten técnicas que van más allá de sus habilidades físicas para sembrar en ellos el amor y el deseo por la danza.
“Invitamos a los niños y a las niñas a jugar, a vivir la danza desde una perspectiva que la puedan explorar al máximo, pero sin que sientan esta presión de lo formal”, indicó la maestra Dulce.
En 2020, Dulce, la mayor de las hermanas, fundó la compañía profesional de danza Tijuana Dance Company (TJDC), una propuesta de diálogo sobre la ciudad de Tijuana, su gente y su historia a través de la danza. A cuatro años, han logrado establecer un “statement” en la comunidad tijuanense y en la región noroeste del país, formando públicos latentes al consumo de danza en cualquier espacio, creando piezas multidisciplinarias como Escenas de Boxeo en colaboración con Dimitri Chamblas.
Marianna, por su cuenta, desde 2023 forma parte del Colectivo Mover la Ciudad, un proyecto que promueve la imaginación colectiva hacía una movilidad sustentable en Tijuana. Ese mismo año, fue beneficiaria del Programa de Estímulos a la Creación de Desarrollo Artístico de Baja California con su proyecto de danza Soy de aquí.
Al finalizar la charla «Danza: juego, vida y profesión», la licenciada Berenice Zamorano hizo entrega de los reconocimientos a Dulce y Marianna Escobedo Muñoz, en agradecimiento por participar en la Semana de la Mujer 2025: Mujeres y Praxis. Testimonios Vivos, que contempla diversas actividades hasta el sábado 8 de marzo mediante charlas amenas y testimonios de vida que tiene como objetivo valorar las prácticas de las participantes invitadas, así como su aportación a una mejor sociedad y porvenir humano.